Durante años, América Latina ha sido un terreno fértil para la innovación tecnológica en seguridad física. Sin embargo, los recientes movimientos regulatorios en EE. UU. y Canadá están modificando silenciosamente las reglas del juego a nivel global—y Latinoamérica no es la excepción.
La Ley de Autorización de Defensa Nacional (NDAA) en EE. UU. y, más recientemente, las restricciones impuestas por Canadá a ciertos proveedores chinos, no solo representan decisiones soberanas: están marcando el nuevo estándar internacional de confianza tecnológica.
Aprobada en 2019, la Sección 889 de la NDAA prohíbe a entidades federales y contratistas usar equipos de videovigilancia de ciertos fabricantes chinos, como Hikvision, Dahua, Huawei, ZTE y Hytera, debido a preocupaciones de ciberseguridad y soberanía tecnológica.
Si bien esta ley no es de aplicación directa en América Latina, su influencia se ha extendido de manera práctica a través de:
En junio de 2025, el gobierno canadiense ordenó el cierre de las operaciones de Hikvision en su territorio luego de una revisión oficial bajo la Investment Canada Act. Además, exigió la auditoría y eliminación de sus equipos ya instalados.
Esta decisión envía un mensaje potente: el tiempo de las tecnologías tipo “caja negra” está llegando a su fin. Transparencia, trazabilidad y responsabilidad en la cadena de suministro se están convirtiendo en factores no negociables.
Mucho. Porque los estándares técnicos globales no necesitan pasaporte para influir en nuestras decisiones de compra, diseño de licitaciones o planes de infraestructura. Hoy vemos:
✅ Gobiernos locales y municipios exigiendo equipos “compliant” como criterio de evaluación
✅ Integradores adoptando marcas con certificaciones alineadas a NDAA o equivalentes
✅ Clientes finales preocupados por riesgos reputacionales o regulatorios
¿Estoy trabajando con tecnologías que me preparan para competir globalmente… o con soluciones que me cerrarán puertas mañana?
La respuesta a esta pregunta es la que determinará si tu empresa lidera el mercado o queda fuera del radar de los grandes proyectos.
En Wavestore, no solo cumplimos con los requisitos NDAA. Vamos más allá. Nuestra plataforma VMS y nuestras soluciones de video están diseñadas para ofrecer:
Y sí: estamos alineados con las expectativas regulatorias de EE. UU., Canadá y más allá.
Sabemos que, en este nuevo entorno de compliance, la elección del hardware adecuado es tan crítica como el software que lo gestiona. Por eso, Wavestore ha desarrollado una línea de cámaras diseñadas desde cero para cumplir con los más altos estándares de adquisición pública y privada.
Cada cámara cuenta con:
✅ Componentes aprobados oficialmente Todas las piezas internas – desde el sensor de imagen hasta la interfaz de red – están en la lista verde del Departamento de Comercio de EE. UU. Esto garantiza que nuestros clientes no enfrenten problemas relacionados con listas negras de la cadena de suministro.
✅ Cifrado de extremo a extremo + arranque seguro El firmware solo se ejecuta si es auténtico y verificado. Además, todos los flujos de video se cifran en tránsito, eliminando riesgos de interceptación o ataques de inyección.
✅ Analítica inteligente integrada Reduce uso de ancho de banda y almacenamiento gracias a funciones como detección de movimiento, cruce de línea, análisis de merodeo y conteo de personas. Todo se configura fácilmente desde nuestra interfaz intuitiva.
✅ Interoperabilidad total Integración perfecta con cualquier ecosistema: desde VMS de múltiples fabricantes hasta soluciones personalizadas. Compatible con ONVIF y, por supuesto, con nuestras propias soluciones end-to-end.
✅ Soporte y gestión del ciclo de vida garantizados Ofrecemos hasta 5 años de garantía y soporte activo, brindando previsibilidad y confianza a largo plazo para integradores y usuarios finales.
No se trata de moda ni de política. Se trata de competitividad, reputación y preparación. En América Latina, quienes entiendan primero este cambio de paradigma estarán mejor posicionados para liderar.
Las licitaciones ya no preguntan solo “¿cuánto cuesta?” También preguntan: “¿cuánto me arriesgo con esta tecnología?”
Si quieres explorar cómo adaptar tu portafolio, procesos o propuestas a esta nueva realidad, estoy a disposición. En Wavestore, creemos que el futuro no se improvisa. Se diseña.